El aumento de la complejidad e incertidumbre en el mercado, es un reto importante que enfrentan las cadenas de abastecimiento a nivel global; la manera tradicional de planificar y gestionar la demanda y la forma en la que esta se relaciona con las diferentes áreas de la compañía, ya no es suficiente y debe evolucionar de la mano de nuevas tecnologías y formas de gestión que garanticen una mejor disponibilidad del producto y un balanceo eficiente en el manejo de los inventarios.